A veces toca viajar solo y en este caso me preparé para ir a Puebla, específicamente a un municipio de Huachinango llamado El Cerro del Tigre.
Diría que es un lugar algo alejado y que va directo a los cerros, pero cuando llegas te encuentras con unas cabañas bien bonitas y unos spots que son de película.
Como siempre, a la moto se le hizo una revisión para que ver que todo estaba en orden, cargué pilas para la cámara, cargué el intercomunicador y todo ese proceso de arreglar la ropa que te vas a llevar.
Estuvo genial, porque fuimos invitados por un amigo, comimos truchas que se crían ahí mismo y nos deslizamos por una tirolesa, caminamos mucho (casi muero) y creo que toda esa experiencia fue increíble.
Es un lugar muy bonito, bastante frío si me lo preguntas, al igual que puede haber mucha niebla, así que un suéter no está de más.